Arn Anderson explica por qué Roman Reigns no funcionó como face

En una nueva entrega del podcast ARN, Arn Anderson rememoró la edición número 32 de Wrestlemania en el año 2016. 

En el evento celebrado en Dallas, Roman Reigns y Triple H se enfrentaron en el combate estelar por el campeonato de WWE. 

Finalmente, tras una disputada lucha, Reigns se hizo con el campeonato completando su ascenso definitivo a la cima como top face en la empresa. 

Pese a ello, WWE no logró consolidar a Roman como la cara de la compañía en los años siguientes, obteniendo reacciones negativas del público en todas sus apariciones.

Consciente de ello, Vince McMahon decidió dar un nuevo rumbo a la trayectoria de Roman con un sorprendente cambio en el año 2020. 

Durante su regreso en el evento de SummerSlam, Roman Reigns cambió al bando heel. 

The Big Dog inició una alianza con Paul Heyman y ganó el campeonato Universal para convertirse en el máximo villano de SmackDown. 

Desde ese momento, el luchador revitalizó por completo su carrera y se ganó el apoyo de gran parte del universo de WWE gracias a su nueva faceta. 

Por ello, Arn Anderson aprovechó la ocasión para analizar la reticencia de Vince McMahon al cambio de Reigns en los años anteriores.

“Fue la fe en si mismo para hacer de cualquier idea una realidad y que todo el mundo lo acepte. 

Ese Roman Reigns iba a ser el líder Babyface de la compañía, en vez de ver cuando años atrás la gente no quería ver a Roman Reigns así. Roman no tiene que decir nada. 

Todo lo que tiene hacer es salir tras la cortina y ser una maquina de pelear”.

“La gente no quiere ver a Roman Reigns como un buen tipo. 

No quieren que sea amable. 

Y por supuesto tampoco quieren que sea entretenido ni que aplique lanzas a seis o cinco villanos de una sola vez”, sentenció Arn Anderson.