Murphy explica cómo fue el proceso hasta conseguir un contrato con WWE

La actual superestrella de WWE Murphy fue entrevistada recientemente en The Bump. 

Entre otras cosas, Murphy habló sobre el proceso que vivió en el tryout para obtener su contrato con WWE. 

Renunció a su empleo habitual para asistir al tryout de WWE

"Alguien me envió un tweet de Bill DeMott donde indicaba que se iba a celebrar un tryout y que, si querías asistir, debías rellenar un formulario, así que lo hice. 

Me acerqué a mi padrastro y le dije 'tengo que hacer esto'. 

Solo hacía un mes que había empezado a trabajar con él y ya le estaba pidiendo dos o tres semanas libres. 'Necesito hacerlo. 

Hay algo dentro de mí que me está diciendo que lo haga. Y si tienes que despedirme, lo voy a entender'. 

Así que lo hice. Me dio su visto bueno. 

Uno de mis amigos también quiso ir, así que compramos un par de billetes de avión y volamos hacia el FCW Arena.

Había unas 80 personas en las pruebas de acceso. 

Uno de ellos era Sami Callihan y a día de hoy sigo pensando que el tryout estaba diseñado específicamente para él, pero se lesionó. 

Sami Callihan era el hombre de moda de la escena independiente en ese momento. 

Pero se hizo daño el primer o el segundo día de pruebas. 

También había todos estos ex jugadores de fútbol americano. 

Yo no soy un tipo grande, así que fue muy duro destacar entre toda esa multitud".

Apostó por un estilo diferente en la prueba de promos

"Estaba decidido a llegar al final. 

No había nada que pudiera detenerme y, en cierta parte, me gustaría haber conservado ese nivel de concentración. 

Norman Smiley y Robbie Brookside dijeron que había sido el tryout más duro a que habían asistido. 

Fueron cuatro días en el infierno. 

Y al final de todo, tenías que hacer una promo para Dusty (Rhodes).

Creo que yo era el número 60 de 80. 

Todas las promos eran muy parecidas. 

'Hola, chicos, solo quiero agradeceros esta oportunidad. 

Es un sueño hecho realidad'. 

Yo me quedé mirando a los jueces. 

No les interesaba aquello. 

Querían ver personajes. 

¿Cómo iba a destacar? Yo no soy bueno en el micrófono, lo admito. 

Todo el mundo hablaba de pie, así que yo me senté y crucé mis piernas. 

Y empecé a hablar con calma. 

Por mi mente pasaron fragmentos de lo que me pasó en el instituto, como el hecho de haber sido, en parte, marginado. 

Fui víctima de bullying. 

Así que usé mi experiencia en la vida real y empecé a hablar de ella. 

Al final, saqué un mechero que había encontrado. 

Lo encendí y me quedé mirando la llama. 

Parecía un personaje pirómano. 

Así que mi mensaje fue, básicamente 'me habéis echo mucho daño. 

Tener cuidado o te quemaras. 

Voy a quemar todo esto'".

Fue el único que consiguió un contrato

"Nos hicieron sentar a todos. 

Había unas 60 personas que ya habían abandonado, así que nos dijeron 'bueno, chicos. 

Han sido cuatro días geniales. Ha sido una tortura. Espero que hayáis aprendido algo. Básicamente, vamos a ofrecer un contrato. 

Y este es para Matthew Adams'. 

No me lo podía creer. 

Me levanté y les estreché las manos. 

Solo ofrecieron un contrato. 

Después, el resto de compañeros me dio la espalda. 

Me había convertido en el villano. 

Y diez segundos antes, todo eran aplausos. No iban a dar más contratos. 

Este fue mi camino. 

Mi ingreso al Performance Center se retrasó muchas veces hasta que entré, finalmente, el 7 de junio de 2012".