Durante la emisión del show de Friday Night SmackDown celebrado el 29 de noviembre, "The Fiend" Bray Wyatt atacó a Daniel Bryan y se lo llevó debajo del ring. El actual campeón Universal comenzó a sacar pelos de debajo del ring, dando a entender que los estaba arrancando de la cabeza de Daniel Bryan. Más adelante, en WWE TLC, Daniel Bryan regresó a la acción y reveló su nuevo look sin barba y la cabeza rapada.

La superestrella de WWE fue entrevistada recientemente para el portal MySanAntonio y reveló de quién fue la decisión de quitarle la barba y el pelo. "En realidad, fue una idea mía", reveló Bryan, "Pero no quería cortarme el cabello, sólo la barba. Les pregunté cómo extenderíamos la historia con Bray Wyatt. Ya me había derrotado limpiamente. Los luchadores cambian de carácter cuando se enfrentan a Wyatt, así que pensé que debía despojar parte de mi identidad. Entonces, me dijeron: 'Bueno, sí, ¡Él también puede cortarte el pelo!' Y pensé: 'No, realmente no quiero eso. No quiero que me corten el pelo'".

"Llegó el día y me dijeron: 'Ok, bueno, él te arrancará parte del pelo'. Me pusieron debajo del ring con dos barberos que me quitaron la barba y el cabello para que pudiera parecer más real. Nos quedaba un minuto y medio de tiempo de televisión en el programa en vivo. También había un productor allí abajo, quien decía: '¡Necesitamos más cabello, necesitamos más cabello, necesitamos más cabello!'. Estaba completamente oscuro allí debajo y nosotros con muy poco espacio porque hay cosas que forman parte del ring que deben estar ahí, lo cual no facilitó el trabajo de los compañeros. Intentaron arreglármelo después del espectáculo durante 45 minutos, pero eso fue lo mejor que pudimos hacer dadas las circunstancias".

Un cambio de look que no gustó a Brie Bella

"A pesar de ser algo divertido, sabía que estaba en problemas, porque mi esposa odia las cabezas rapadas. Nunca le han gustado, y le envié un mensaje de texto inmediatamente después. Su respuesta fue: '¿Qué hiciste?'. Traté de tomarme un par de fotos antes de enfrentarla, pero ninguna de ellas salió bien. Afortunadamente, eso sucedió el día después del Día de Acción de Gracias, volé a casa ese sábado y teníamos un montón de familia y cosas allí, así que ella no podía estar demasiado enojada. Uno o dos días más tarde, explotó".