La dueña mayoritaria de la empresa TNA Wrestling, Dixie Carter, concovó anoche una reunión de urgencia en Orlando. Según ha podido saber el portal especializado PWInsider, Carter se reunió con todos los talentos y miembros del staff antes de comenzar las grabaciones para televisión. El objetivo de este encuentro fue tranquilizar a los trabajadores ahora que están circulando tantos rumores sobre la posible venta de TNA. Dixie Carter, con el fin de transmitir confianza, permitió a los asistentes realizar todo tipo de preguntas.
Dixie Carter reconoció que han recibido ofertas de compra por parte de WWE. Tuvo la oportunidad de vender TNA; pero no lo hizo y pretende evitarlo a toda costa. Carter también confirmó que la videoteca de la empresa sigue siendo propiedad de TNA. Con esta noticia se confirman todos los rumores que han circulado por la red esta semana sobre la oferta de la familia McMahon.
Otro de los puntos a tratar fue la estructura empresarial y la economía de la empresa. A pesar de vender una parte importante de la empresa, Dixie Carter aseguró que sigue siendo la dueña mayoritaria de TNA. Billy Corgan es el presidente y está intentado ganar más poder, algo que, para Dixie, está causando ciertos "conflictos de poder". El referencia al retraso en los pagos, Dixie se excusó diciendo que en ocasiones deben esperar a recibir el dinero que les deben antes de poder abonar los sueldos.
Para concluir la reunión, Carter dijo que en ningún momento hubo posibilidades de cancelar el evento Bound For Glory. Lo único cierto es que han aparecido nuevos problemas esta semana; pero ninguno afectaba de manera directa a la grabación y retransmisión del evento por formato Pago-Por-Visión (PPV).
Según informan las fuentes internas de PWInsider, el sensación ahora mismo en backstage es compleja. Por un lado los talentos respetan la actitud abierta de Dixie Carter para hablar sobre la difícil situación; sin embargo, siguen estando preocupados por el futuro de la empresa. Esta semana terminarán de grabar material para televisión y desconocen si el año que viene conservarán su puesto de trabajo.
Dixie Carter reconoció que han recibido ofertas de compra por parte de WWE. Tuvo la oportunidad de vender TNA; pero no lo hizo y pretende evitarlo a toda costa. Carter también confirmó que la videoteca de la empresa sigue siendo propiedad de TNA. Con esta noticia se confirman todos los rumores que han circulado por la red esta semana sobre la oferta de la familia McMahon.
Otro de los puntos a tratar fue la estructura empresarial y la economía de la empresa. A pesar de vender una parte importante de la empresa, Dixie Carter aseguró que sigue siendo la dueña mayoritaria de TNA. Billy Corgan es el presidente y está intentado ganar más poder, algo que, para Dixie, está causando ciertos "conflictos de poder". El referencia al retraso en los pagos, Dixie se excusó diciendo que en ocasiones deben esperar a recibir el dinero que les deben antes de poder abonar los sueldos.
Para concluir la reunión, Carter dijo que en ningún momento hubo posibilidades de cancelar el evento Bound For Glory. Lo único cierto es que han aparecido nuevos problemas esta semana; pero ninguno afectaba de manera directa a la grabación y retransmisión del evento por formato Pago-Por-Visión (PPV).
Según informan las fuentes internas de PWInsider, el sensación ahora mismo en backstage es compleja. Por un lado los talentos respetan la actitud abierta de Dixie Carter para hablar sobre la difícil situación; sin embargo, siguen estando preocupados por el futuro de la empresa. Esta semana terminarán de grabar material para televisión y desconocen si el año que viene conservarán su puesto de trabajo.
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